Hora del desayuno, lunes.
En la barra un tipo que llevaba más de veinte minutos despotricando de todo, daba perfectamente el perfil de esa gente que vive indignada full time.
En la mesa redonda, cerca, Pito lee en su iPad una de Connelly.
En las paredes mujeres mirando arte.
Yo pensaba si el tipo de la barra tenía la cabeza para poder engominarse el pelo o si dentro -muy oculto- guardaba algo.
Fue cuando ya totalmente indignado soltó: "Es inadmisible que en Kentuky Fried Chiken no tengan ninguna oferta sin carne".
"Que cierto" intervino Pito "el otro dia fui a la tienda de alfombras de mi calle, pedí unas gafas y no tenían. ¡¡Qué desfachatez!!
No estoy seguro si el indignado se entero, pero si de que el aplauso generalizado de todos los que estábamos en el Hope a Pito le mosqueó bastante.
Si es que... a pedirle peras al peral.
ResponderEliminarIkana: Alguna gente se indigna como modo de vida
EliminarEl indignado seguro no se enteró. Esos seres tienen una habilidad increíble para no darse cuenta de lo que ellos deberían corregir.
ResponderEliminarBesos
Alís: es que el grupo de los indignados por todo y en todo momento no tienen nada que corregir...¡¡¡faltaría más!!!
EliminarBuena respuesta la de Pito.
ResponderEliminarEn cuanto a las mujeres mirando arte, me gustan las mujeres que miran, que el arte observado.
Demiurgo: Pito tiene facilidad para encontrar respuestas.
EliminarMe gustan mucho las imágenes de personas mirando arte.
Y el arte de estas imágenes me gusta bastante. Mucho más Rothko del que soy fan que Pollock (aunque reconozco que los dos mega cuadros que tienen en el MET impresionan en directo).
Demasiadas personas que malviven su vida viviendo indignada.
ResponderEliminarCada día que pasa las aguanto menos y me alejo todo lo posible de ellas.
De Rothko, hay unas obras del 45 que me gustan especialmente.
Carmela: Es lo mas recomendable: Evitarlas.
EliminarCada vez que viajo a Londres tengo una visita obligada a la sala de los Rothkos en la Tate Modern.