Mar estaba con Pito, tomando un helado de turrón y sin nada mas especial que hacer que ver las imágenes simples de vidas complicadas que el Hope tenia en sus paredes.
Ella en la mesa de la terraza, leyendo un libro y aprovechando la mejora de la temperatura.
Llegó otra chica que se disculpo por la tardanza.
* No te preocupes, le dijo moviendo el libro.
* ¿Qué lees?
* "Lo que se puede sustituir nunca es tan importante”.
* Es una de esas verdades -dijo Mar- que hay que tener siempre presente.
* Mi lista de insustituibles es muy corta. Contestó Pito.
Los insustituibles han de ser pocos, sí, porque las cosas verdaderamente importantes son pocas.
ResponderEliminarPor ejemplo, el helado de turrón :D
Quiero decir el helado de turrón en compañía de la persona adecuada.
Ángeles: de acuerdo en pocas, de acuerdo en el helado de turrón y muy de acuerdo en la persona adecuada.
EliminarTambién es importante detectar lo que no es o quien no es imprescindible. Ayuda a actuar sin caretas.
mis listas casi han desaparecido......
ResponderEliminarJuana: Siempre puedes empezar a llenarlas de novedades. Todo es lanzarse.
Eliminarmis listas casi han desaparecido......
ResponderEliminarJuana: si han desaparecido es que ya no son insustituibles. A por una nueva lista.
EliminarInteresante y muy cierta esa frase de tus protas tanto la de que "lo que se puede sustituir nunca es tan importante" como la lista cortísima de insustituibles, me ha hecho pensar en lo frívolos que a veces somos cuando se valora aquello que no se debe valorar y se deja pasar a aquello que sí es importante, que es insustituible y que probablemente, no volverá.
ResponderEliminarConxita: Es una verdad verdadera. Y valorar lo poco que nos roza que es insustituibles nos debería empujar a hacer lo necesario para no perderlo.
EliminarY saber que lo que se puede sustituir tiene el valor que tiene.