La fiesta languidecía, eran algo así como las tres o las cuatro de la madrugada, cuando sorprendentemente ella -que había sido toda la noche el centro de atención- quedo sola en una de las mesas. Giró su cabeza y me miró. Detenidamente. De arriba abajo.
Fue cuando se dió cuenta de que tenía el vestido abierto dejando un trozo de pezón a la vista. Ni se inmuta. Sonrío, ella también.
¡¡ Que menos que acercarse !!
Y resultó que estaba harta de moscones que revoloteaban a su alrededor y que se había fijado en mí porque fui el único que no se le acercó en toda la noche.
Y tuve que explicar que no me acerqué porque estaba todo el rato rodeada de ¿moscones? y yo soy más bien terrenal.
Y resultó que hubo risas y afinidad. Algún roce. Y -ya puestos- algún beso.
Eso fue hace tres días, nos hemos visto tres veces, en este momento estamos chateando:
* Lo que me impresiona de ti es a las horas de la madrugada que ya estás en funcionamiento. Esas horas en que si yo me levantara sería un tipo andando con los ojos cerrados y el encefalograma plano. Dije.
* Yo te he visto bastante despierto muy de madrugada. Dijo.
* Es que hay mujeres -y no quiero señalar- como terremotos que te ponen en tu mejor versión (modo totalmente activo) solo plantarse ante ti. ¡¡¡¡¡Y todavía vestidas!!!!!!!!
pd: Fijate en el "totalmente". Dije.
* ¿Como terremotos? pd: me he fijado y me gusta "esa" activación. Dijo.
* Sí terremotos. Hacen temblar…. tu ya sabes. Dije.
Y resulta que ya estamos en el cuarto día y ella me espera -como las tres veces anteriores- en la cama.
Desnuda, como las tres veces anteriores.
Una espera corta, como las tres veces anteriores.
<magistrales obra de arte, que talento. Hay quienes son visitados por las musas. Y creo que hasta acepta posar.
ResponderEliminarCuanta belleza.
Y la historia quedó muy bien. Cuanta astucia la del narrador personaje.
Demiurgo: Soy de los que no son capaces de pintar nada, quizá por eso admiro tanto a quienes tienen ese talento.
EliminarIlusión perdida
ResponderEliminarErik: De eso tengo toneladas. De ilusión, digo.
EliminarMe gusta la historia, y los seres terrenales. Y ya puesta, los terremotos y los temblores.
ResponderEliminarUn beso, Guille.
Carmela: Es que los terremotos y los temblores son imbatibles.
Eliminar