Estoy en mi sesión diaria del Hope. Bebo café latte. Suena Lorde, que tiene varias canciones que me gustan.
Comparto mesa con dos amigas de Mildred.
La morena va y dice: "He tenido un día perfecto. ¿Sabes como? He dejado de lado todas esas cosas que se supone que debo hacer, me olvide de quien soy y pensé que soy cualquier otra persona y solo me dedique a hacer lo que me apetecía".
silencio
"¿Y tu?
La rubia sonríe y contesta: "Yo no paré de hacer cosas, una detrás de otra, que me hicieran olvidar chequear mi móvil. Un día genial".
Ya lo dijo el despeinado ese -pensé- "si quieres cambiar tu vida, empieza por cambiar lo que haces".
Y es tan fácil realizar esos cambios...
ResponderEliminarHay que hacer de vez en cuando ¡ SI !
Besitos
Nieves: Cuando lo que se tiene se convierte en insuficiente hay que atreverse.
EliminarY si, es mas fácil de lo que parece.
A veces hacemos las cosas por pura inercia, sin pensar no ya si nos gustan o no, sino ni siquiera si son en verdad necesarias.
ResponderEliminarÁngeles: esa es la parte negativa de la rutina, que la hacemos porque si, y nos perdemos mucho.
EliminarLa vida requiere atreverse a querer aprovecharla a full.
Hay que practicar esa forma de vivir los días.
ResponderEliminarSienta genial.
Carmen: Suele ser mas fácil de lo que parece, solo necesita atrevimiento y no es mas cara que la rutina.
EliminarYo que disfruto enormemente de mis rutinas, reconozco que a veces cambiar está bien. Más que nada porque permite incorporar rutinas nuevas...jajajaja
ResponderEliminarAlicia: Siempre he diferenciado rutina de repetición. En el primer caso lo asocio con hacer cosas sin pensar. Me parece algo monótono.
EliminarSiempre quiero repetir lo que me da placer. Pero ni se me ocurre hacerlo rutinariamente. (Dedícale un pensamiento a algo que te gusta y mide si lo harías de forma rutinaria).
Solo hay que cambiar lo que nos es insuficiente. Saber mantener lo que nos gusta es tarea de personas sabias.