La mujer de la foto está en la versión moderna de su propio castillo, con sus propios recursos, y dando órdenes. Es una época en que una princesa puede renunciar a su título, para tomar decisiones por si misma, gana su propia fortuna. En esos cuentos, quienes era muy autonomas eran las hadas. No dependían de nadie.
Demiurgo: Lo verdaderamente importante es dirigir la propia vida. Que se tomen las decisiones eligiendo lo que se prefiere, no lo que te dicen que debes preferir.
Desde pequeña le dije a mi hija, "prepárate, estudia, sé fuerte, inteligente y autosuficiente, no quiero que dependas de nadie", y otras cosillas que volvería a dejarte un larguísimo comentario 🤗 Ya me conoces [creo]
Adel: Te repito que me encantan los comentarios rio. Esos que son largos y tardan en leerse mas que llo que se tarde en leer un libro del Marías, que no baja de las 400 páginas.
Eva: Lo que pasa que en los otros igual llegabas a los cuarenta años, el príncipe se liaba con la criada y tu sin empleo ni ingresos tenías que comerte el orgullo y aguantar.
Mucho mejor los cuentos modernos ¡¡¡andevasaparar!!! (y los castillos ni te cuento ...jajaja)
pd: A quienes dicen que esto no es felicidad, la felicidad se la tiene que dar un@ mism@, no dejarla en manos de los demás (bueno, se me está ocurriendo algo de felicidad que sí está en manos ajenas, pero dura un ratito corto...jajaja)
Alicia: Ahora algunos pisos de renta lim itada tienen muchas más comodidades que los castillos en el siglo XIII.
Pd: Es que hay gentes que se quejan de todo y todo el rato que esperan que sean los demás quienes les arreglen la vida. No ponen nada de su parte. (bueno, esa felicidad para un ratito tambien llega por decision propia).
Por suerte la sociedad está cambiando y ahora podemos contar cuentos de chicas valientes que van por su vida sin necesidad de que otros las completen o protejan.
Aún así todavía hay muchas cosas que superar, prejuicios, estereotipos... Bien sea de hombres o las mismas mujeres, que a veces son las más intransigentes con su propio sexo... o indefension del sexo femenino en depende que lugares y situaciones. Doy fe que no siempre es fácil ir donde una cree y no pensar o sentir miedo.
mukali: En este tema se ha mejorado mucho. Solo hay que comparar las mujeres que iban a la universidad a principios de los sesenta y las que van ahora.
Porque ella lo vale.... ¿No?
ResponderEliminarNo diré nada de las fotos que es peor
Erik: Solo las personas que lo valen son capaces de ser propietarias de su vida.
EliminarEso no me lo puedes hacer, ahora me quedo con la curiosidad de lo que nos has dicho.
Cuántos tropiezos nos hubiésemos ahorrado las mujeres si nos hubieran contado así el cuento...
ResponderEliminarBacio.
AlmaBaires: Algunas han tenido que aprenderlo sobre la marcha.
EliminarAhora toca que las nuevas generaciones crezcan enseñadas.
Y colorín colorado este cuento (de verdad) se ha acabado.
ResponderEliminarAsí debería haber sido siempre...
Besos y a dormir. 😊
Laura: Lo de antes ya no tiene arreglo.
EliminarLo que viene si.
Es uno de los mejores legados que podemos transmitir.
La mujer de la foto está en la versión moderna de su propio castillo, con sus propios recursos, y dando órdenes.
ResponderEliminarEs una época en que una princesa puede renunciar a su título, para tomar decisiones por si misma, gana su propia fortuna.
En esos cuentos, quienes era muy autonomas eran las hadas. No dependían de nadie.
Magistral imagen.
Demiurgo: Lo verdaderamente importante es dirigir la propia vida. Que se tomen las decisiones eligiendo lo que se prefiere, no lo que te dicen que debes preferir.
EliminarDesde pequeña le dije a mi hija, "prepárate, estudia, sé fuerte, inteligente y autosuficiente, no quiero que dependas de nadie", y otras cosillas que volvería a dejarte un larguísimo comentario 🤗
ResponderEliminarYa me conoces [creo]
Adel: Te repito que me encantan los comentarios rio. Esos que son largos y tardan en leerse mas que llo que se tarde en leer un libro del Marías, que no baja de las 400 páginas.
EliminarBuen consejo. Si es lista te hará caso.
Un buen final, sin duda. Aunque confieso que los otros, tampoco me disgustan... Lo importante es ser feliz cada uno como le dé la gana.
ResponderEliminarUn beso empoderado.
Eva: Lo que pasa que en los otros igual llegabas a los cuarenta años, el príncipe se liaba con la criada y tu sin empleo ni ingresos tenías que comerte el orgullo y aguantar.
Eliminarja, ja, ja...
EliminarUn beso a carcajadas.
Eva: Ya veo que no se va a dar el caso.
EliminarVerdad. Pero metiéndose en líos de parejas sin necesidad. Falta independencia emocional aún.
ResponderEliminarMelita: Algunas parejas se eligen para ser más felices y de esas algunas, algunas lo logran.
EliminarNo sé qué decirte, la felicidad no es tan simple.
ResponderEliminarEs el final feliz que vendió el feminismo, un cuento más como tantos y tantos cuentos.
Bonito, eso sí, como todos los cuentos.
Besos.
Amapola: Soy de los que creo que la vida en realidad es bastante simple. Y que suelen encontrar más fácilmente la felicidad quienes así lo creen.
EliminarNo se trata de feminismo, se trata de tener control sobre la propia vida. Elegir lo que se desee.
Es simple, se es más feliz así.
Poder elegir frente a lo que dicten las modas o la sociedad, eso sí es verdadera libertad.
EliminarBs.
Amapola: Cierto, eso es exactamente lo que dice esta entrada.
EliminarEse es el cuento que de tener yo hijos pequeños, le contaría. De lo que tratara de igual.
ResponderEliminarSAludos.
Manuela: Esa es la responsabilidad que nos toca. Una de las vías de cambiar el mundo.
EliminarMucho mejor los cuentos modernos ¡¡¡andevasaparar!!! (y los castillos ni te cuento ...jajaja)
ResponderEliminarpd: A quienes dicen que esto no es felicidad, la felicidad se la tiene que dar un@ mism@, no dejarla en manos de los demás (bueno, se me está ocurriendo algo de felicidad que sí está en manos ajenas, pero dura un ratito corto...jajaja)
Alicia: Ahora algunos pisos de renta lim itada tienen muchas más comodidades que los castillos en el siglo XIII.
EliminarPd: Es que hay gentes que se quejan de todo y todo el rato que esperan que sean los demás quienes les arreglen la vida. No ponen nada de su parte. (bueno, esa felicidad para un ratito tambien llega por decision propia).
Tanto tiempo que hemos estado engañadas con el cuento del príncipe azul, que ni es príncipe ni azul... y por el que hemos besado a tantos sapos.
ResponderEliminarBesos
Alís: Una pregunta ¿Ha besado usted muchos sapos?
Eliminar¿A partir de que numero se considera muchos?
Por suerte la sociedad está cambiando y ahora podemos contar cuentos de chicas valientes que van por su vida sin necesidad de que otros las completen o protejan.
ResponderEliminarAún así todavía hay muchas cosas que superar, prejuicios, estereotipos... Bien sea de hombres o las mismas mujeres, que a veces son las más intransigentes con su propio sexo... o indefension del sexo femenino en depende que lugares y situaciones. Doy fe que no siempre es fácil ir donde una cree y no pensar o sentir miedo.
mukali: En este tema se ha mejorado mucho. Solo hay que comparar las mujeres que iban a la universidad a principios de los sesenta y las que van ahora.
EliminarMuy solitariamente
ResponderEliminarIkana: Sola o acompañada, eso será ya decisión de ella.
EliminarNos costó eh! Imprescindible para cuentos felices
ResponderEliminarlopillas: hay que saborear el haber llegado hasta aquí.
EliminarY ahora nos toca mejorarlo y traspasarlo a las siguientes generaciones.