* Mi hija me tiene agotada, desde que dejó el chupete cuando no está leyendo no para de preguntar.
Pito la miró.
* Es bueno enseñar a los hijos a ser preguntones.
* ¿Por?
* Para que pidiendo el por qué de lo que se las manda hacer se acostumbren a obedecer a la razón.
(pausa)
* No a la autoridad como los limitados.
(pausa)
* Ni a la costumbre como los estúpidos.
Creo que Sí.
ResponderEliminarYo tengo dos y no paran. Desde pequeñas...
Una es Musico, Maestra y Medio Psicóloga.
La otra bioquímica.
Deben haber salido a su madre.
Erik: Puede que hayan salido a la madre, pero eso de que es música en algo se verá influenciada por el padre.
EliminarEs una alegría que la descendencia nos salga preguntona.
¿ Y por qué me gusta tanto venir aquí? 😉
ResponderEliminarBesitos.
Laura: ¡¡Mira que eres preguntona!! jajajajajaja
EliminarEvidentemente por mi infinito encanto.
...o quizá porque quienes son encantadores son mis protas.
Aplaudo esta entrada, si señor. Enseñémoslos a dudar. Vivimos en una sociedad a la que le interesa que sus individuos no se pregunten, que no reflexionen, ni se formen una opinión critica ni rebelde de la vida. Eso no le conviene a este sistema. Por eso la musica, las artes y tantas materias capaces de hacer reflexionar al individuo...no interesan.
ResponderEliminar¿Porque? me pregunto yo, tantas veces...Quizás solo porque les interesa que vivamos abobados, pendientes de no darle al coco ni preguntarnos tantas cosas que quieren imponernos sutilmente.
Besos, Guille.
mukali: Te ha salido la vena profe. jajajajaja
EliminarPero soy partidario de no echar la culpa al sistema y de que nos preocupemos de que hacemos nosotros para que las personas que nos rodean puedan ser ellas mismas, naturales, sin tener que disimular, ni disfrazarse.
¿Sutilmente? Hay partes de ese sistema que nombras que no tienen esa palabra en su diccionario.
En los colegios deberían enseñar a preguntar más que a responder.
ResponderEliminarUn abrazo
Alís: En los colegios deberían tener presente que lo importante no es enseñar, es aprender.
EliminarY aprender a preguntar hace mejores personas.
Está bien eso que plantea Pito. Mejor la razón que la autoridad y las costumbres.
ResponderEliminarDemiurgo: Es que seguir a la autoridad o las costumbres sin razonar empobrece la vida.
EliminarPitó como siempre exacto
ResponderEliminarodalys: está en su naturaleza.
EliminarCómo me gusta...😏
ResponderEliminarSin falsas modestias, puedo asegurar que si algo siempre le enseñé a mi hija es a preguntar; y siempre le he respondido hasta colmar esa curiosidad (nunca más allá, sobre todo cuando era pequeña... hace tiempo Aimé)
Un bacio ¿o un cappuccino?
AlmaBaires: las personas que preguntan, aprenden lo que no saben. Y tienen esa cualidad genial: Curiosidad.
EliminarUn cappuccino puede dar mucho juego.
Es que este ya nos ha pillao', Laura.
ResponderEliminarErik: Y todo el esfuerzo que pongo para conseguirlo.
ResponderEliminarjajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja
Yo no sé si les enseñé a ser preguntones, pero estoy muy orgullosa (mira como me inflo) de las personas que son.
ResponderEliminarSiempre me dejas pensando
Besitos
lopillas: dejar pensando es uno de los objetivos de este blog.
EliminarHaces bien en sentirte orgullosa.
¿En serio?
ResponderEliminarIkana: Totalmente
EliminarAplaudo la entrada de principio a fin.
ResponderEliminarEspíritu crítico, curiosidad, conocimiento... todo eso se gana preguntando. A veces hasta hay que cuestionarse a uno mismo para poder renacer en otra versión mejorada.
Alicia: La curiosidad es mi segundo mayor vicio.
EliminarMe en canta preguntar. Y pregunto de todo.
Auto cuestionarse es recomendable.