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jueves, 2 de junio de 2016

todo depende -siempre- de nuestras elecciones




En realidad somos lo que fingimos ser.
Por lo tanto ¡¡ cuidado con lo que fingimos ser !!




12 comentarios:

  1. jajajajaja...la verdad que la frasecita se las trae por retorcida...pero es tan cierta como una buena mentira.

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    1. Alicia: Es una mentira tan buena que deviene en verdad verdadera.

      La pregunta fundamental es ¿por que fingimos ser de esa manera?

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  2. Interesante cuestión que me lleva a otra: ¿elegimos nosotros lo que queremos fingir, o, como dice Vila-Matas, los demás nos obligan a que seamos como ellos nos ven?

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    1. Ángeles: ¿Y porque fingimos para ser como ellos quieren?

      Elegimos, sea por que nos gusta, por miedo o por instinto camaleónico.

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  3. Creo, que a veces, por los motivos que sea, es necesario ponerse caretas para seguir o sobrevivir y no pasa nada, mientras sepamos quiénes somos realmente, por qué lo hacemos y no nos creamos nuestros propios fingimientos.
    Fingir no es ser, aunque sí ¿por qué fingimos? ir contra corriente, ser distinto, no siempre es fácil pero la honestidad con uno mismo, te hace estar bien y ser feliz.

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    1. Conxita: Si sabemos porque fingimos y estamos de acuerdo en la pertinencia del fingimiento y el fingir es temporal y no tapa lo que verdaderamente somos el problema es menos. Se llama necesidad temporal.

      Si fingimos para ser lo que no somos, nos convertimos en lo que fingimos. Y esa nunca es la mejor posibilidad.

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  4. Guille, sí que sabes resumir ideas.

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    1. Gadi: Si eres capaz de decir lo que quieres trasmitir con pocas palabras mejor no hacer leer a quien se interesa mas de la cuenta.

      Por cierto aún no me has explicado por que Gadi

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  5. de acuerdo ...tan es así que cuando juzgamos a alguien tan solo lo estamos etiqueteando con nuestros defectos

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    1. Odalys: Ya sabes que suelo decir que lo que criticas te define.

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  6. Hombre, todo-todo...
    si lo dejamos en que siempre podemos elegir lo que queremos de entre lo que tenemos, si.

    Podemos elegir cruzar la calle o no. Si tenemos cruzarla si o si (porque hay que llegar al otro lado por el motivo que sea) nuestra elección se limita a elegir si cruzar en rojo o en verde.

    Y luego hay cosas que no están en nuestras manos elegir, y también debemos vivir con ellas, así que un poco de fingimiento casi es como el aire, indispensable. Pero poco, eso si, no vayamos a confundir quien somos.

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    1. Alicia: Solo se puede elegir en lo que tenemos voz y voto -sino ya no cabríamos en la tierra o se habría inventado una formula para (a) follar con 2100 años de edad y (b) que no nacieran descendientes desde ya hace 2000 años- y ya podemos considerar eso suficiente.

      El rojo y el verde lo ilumina una maquina, y a las maquinas solo hay que utilizarlas si te sirven. ¿Te imaginas a las cuatro de la madrugada en calles desiertas esperando a cruzar a que se ponga verde?

      ¡¡ Ves !! Somos lo que fingimos. Y solo consideras aceptable fingir lo indispensable para respirar.

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