Es bonito tu "aprender a vivir como se nace", sería mucho más fácil dejarse guiar por aquello más instintivo, más natural y menos artificios. Deberíamos recordarlo de adultos y recuperar a ese niño que llevamos dentro.
A mí me parece bien que alguien elija, como Jakob von Gunten, una vida de obediencia, de servicio a otros. Insisto: si es elección voluntaria. Cada uno es feliz a su manera. Lo que no tiene sentido es, como bien dices, elegir eso y luego andar quejándose. Aunque igual es que lo que les gusta es precisamente el andar quejándose.
Es bonito tu "aprender a vivir como se nace", sería mucho más fácil dejarse guiar por aquello más instintivo, más natural y menos artificios. Deberíamos recordarlo de adultos y recuperar a ese niño que llevamos dentro.
ResponderEliminarConxita: De acuerdo con lo que dices-
ResponderEliminarDemasiada gente se rinde demasiado pronto. Peor, hay gente que no sabe vivir sin obedecer.
Suelen ser esos que luego se quejan de que nada es como ellos quisieran.
A mí me parece bien que alguien elija, como Jakob von Gunten, una vida de obediencia, de servicio a otros. Insisto: si es elección voluntaria. Cada uno es feliz a su manera.
ResponderEliminarLo que no tiene sentido es, como bien dices, elegir eso y luego andar quejándose. Aunque igual es que lo que les gusta es precisamente el andar quejándose.
Ángeles: Elegir obediencia puede interpretarse como libre albedrío y yo pensaría que esa persona sirve pero no es un siervo.
EliminarSiervo es el que necesita que le digan lo que tiene que hacer y por añadido como tiene que vivir.
Estoy de acuerdo contigo; que cada uno viva como elige.
Los mequejodetodosoloyosecomodebeserelmundoperonohagonadaparaconseguirlo son muy, pero que muy cansinos.
Una labor debida y de vida.
ResponderEliminarAlicia: I agree.
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