Sí, y muchas veces nos sorprendemos recordando momentos, en apariencia ordinarios, que por alguna razón se resisten al olvido. Y asi, por inolvidables, se hacen extraordinarios a sí mismos, como si tuvieran voluntad propia.
Ja, ja, muy bueno, Guille. Tengo que acordarme de que si dejo el comentario por el móvil aparece repe (I don't know why) y me hace parecer una recalcitrante :D
La pena es que esos grandes momentos pasen desapercibidos...disfrutarlos y estrujarlos al máximo mientras los vives y después vuelven una y otra vez cuando los recuerdas, hasta con las mismas sensaciones que has tenido... Pero a veces es difícil ser sabio y darse cuenta de que ese momento es único, ahora, hoy, no ayer o mañana, ahora y disfrutar intensamente.
Conxita: A veces -no siempre- nos damos cuenta que hemos compartido tiempo con alguien que nos completa, que nos mejora...pero lo percibimos a toro pasado.
A veces hasta lo hacemos cuando le perdemos. Al faltar notamos su importancia.
Por eso la importancia de vivir abiertos a todo lo que nos pasa. Por eso la importancia de reconocer a quienes no queremos perder. Por eso la importancia de cuidarlos.
Hablando de recuerdos y de momentos ordinarios, y como ya conoces mi fea costumbre de referirme a mí misma, no te sorprenderá que te deje esto Espero que te guste.
Una entrada buenísima, desde el título hasta la esencia. De las mejores que te he leído últimamente. Procuro andar con los ojos abiertos, pero es cierto que a veces no me doy cuenta de que ese preciso momento que estoy viviendo, eso, precisamente ese, será algo que recordaré toda la vida. Curioso como conjugamos los tiempos los humanos. Viviendo siempre en presente continuo no dejamos de pensar en fututo o en pasado.
alicia: Vivir el presente que es lo único que hay Saber que el mejor tiempo de tu vida es el futuro, que es donde vas a habitar el resto de tu tiempo en la tierra. Y recordar que el pasado te ha conformado y punto. Ni volverá, ni se repetirá, ni cambiará. Ya pasó.
Sí, y muchas veces nos sorprendemos recordando momentos, en apariencia ordinarios, que por alguna razón se resisten al olvido. Y asi, por inolvidables, se hacen extraordinarios a sí mismos, como si tuvieran voluntad propia.
ResponderEliminarMe gusta mucho esta poesía tuya.
Ángeles: Se hace necesario obtener la sabiduría de reconocer lo extraordinario mientras se está viviendo.
EliminarCuando no somos capaces nos sorprendemos deseando que algo que pasó se repita. Y preguntándonos como se nos escapó lo valioso de ese momento.
Solo puedo decir que me gustan tus gustos.
Pues también me gusta mucho el título de esta entrada.
EliminarPues también me gusta mucho el título de esta entrada.
EliminarÁngeles: Que sepas que pongo mucho cariño en los títulos.
EliminarMe siguen gustando tus gustos...añado que me suelen gustar las personas que tienen gustos que me gustan.
Ángeles: Y las personas que me lo repiten, ni te cuento
Eliminarjajajajajajaja
Ja, ja, muy bueno, Guille.
EliminarTengo que acordarme de que si dejo el comentario por el móvil aparece repe (I don't know why) y me hace parecer una recalcitrante :D
Ángeles: Ya te dije que me gusta. Me deja campo para el juego.
EliminarY si, ya he detectado que ocurre cuando se conecta desde el móvil. Y como tu desconozco la razón.
yo por eso me conformo con el presente, que ya es bastante....
ResponderEliminarbesos.
juana: En el presente parece que estás en modo "resistir".
EliminarDeseo un futuro para ti en modo "disfrutar"
Es cierto. Muchos grandes momentos pasan desapercibidos a simple vista. Un besote.
ResponderEliminarAlter: Pasan desapercibidos en el momento. Luego los descubrimos como grandes.
EliminarLa pena es que esos grandes momentos pasen desapercibidos...disfrutarlos y estrujarlos al máximo mientras los vives y después vuelven una y otra vez cuando los recuerdas, hasta con las mismas sensaciones que has tenido...
ResponderEliminarPero a veces es difícil ser sabio y darse cuenta de que ese momento es único, ahora, hoy, no ayer o mañana, ahora y disfrutar intensamente.
Conxita: A veces -no siempre- nos damos cuenta que hemos compartido tiempo con alguien que nos completa, que nos mejora...pero lo percibimos a toro pasado.
EliminarA veces hasta lo hacemos cuando le perdemos. Al faltar notamos su importancia.
Por eso la importancia de vivir abiertos a todo lo que nos pasa.
Por eso la importancia de reconocer a quienes no queremos perder.
Por eso la importancia de cuidarlos.
Y eso sucede con los buenos recuerdos... pero también con los malos.
ResponderEliminarEuterpe: Ciertamente, pero lo malo hay que aprender a sacarlo de la cabeza con rápidez.
EliminarNo sirve para nada darle vueltas a lo malo que ya pasó.
Mejor focalizar en la parte sonriente de la vida.
Hablando de recuerdos y de momentos ordinarios, y como ya conoces mi fea costumbre de referirme a mí misma, no te sorprenderá que te deje esto
ResponderEliminarEspero que te guste.
Ángeles: Perdona bonita, pero en está casa esas referencias pueden ser consideradas de diferentes maneras, pero ninguna es fea.
EliminarMe ha gustado.
Y tu puntualidad británica tiene que ser familia directa de la mía (de origen indeterminado, pero puñetera como ella sola).
Lo distinto que tu eres una chica guapa y atraes compañía y yo mejor me pongo a leer.
Esas pequeñas cosas que de repente invaden nuestra memoria y nos obligan a hacer preguntas.
Una entrada buenísima, desde el título hasta la esencia. De las mejores que te he leído últimamente.
ResponderEliminarProcuro andar con los ojos abiertos, pero es cierto que a veces no me doy cuenta de que ese preciso momento que estoy viviendo, eso, precisamente ese, será algo que recordaré toda la vida. Curioso como conjugamos los tiempos los humanos. Viviendo siempre en presente continuo no dejamos de pensar en fututo o en pasado.
alicia: Vivir el presente que es lo único que hay
EliminarSaber que el mejor tiempo de tu vida es el futuro, que es donde vas a habitar el resto de tu tiempo en la tierra.
Y recordar que el pasado te ha conformado y punto. Ni volverá, ni se repetirá, ni cambiará. Ya pasó.