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domingo, 7 de junio de 2020

una de arena y una de cal



Hoy he ido al museo a ver un desfile de moda infantil -decía Mildred en un Hope bastante vacío- y en tres minutos he visto eso que llaman el yin y el yan.

* No se llama el yin y el yan.

* Es lo mismo. Para llegar al desfile había que recorrer varias salas, en la primera una mujer sentada ante un griego desnudo parecía hablar sola. Pasé por detrás de ella justo en el momento que susurraba "Querida decepción, hay mas gente".

(Risas)

Y al llegar a donde se iba a realizar el acto me tope con dos niñas entusiasmadas con la oportunidad de jugar a ser modelos. Y una madre le decía a otra "Es que en la vida no faltan maravillas. Lo que falta es asombro". Me pareció bonito... y verdad.


14 comentarios:

  1. Mantener la capacidad de asombro, y la curiosidad, ayuda a tener una vida más agradable.

    Un abrazo

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  2. Vees... Es lo del cristal de colores.

    Para que darle mas vueltas.

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    1. Erik: Hay cosas que por más vueltas que le des no van a cambiar.

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  3. Es bonito, y es verdad.

    Un beso, Guille.

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    1. Carmela: eso es algo que tenemos que intentar no perder.

      Si, resulta bonito tropezar con esas verdades.

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  4. Hola Guille, cuando pierdes la capacidad de asombro es como estar frente a la nada.
    saludos

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    1. bella: Me cuesta imaginarme sin asombrarme por lo que asombra asombrosamente.-

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  5. Dos princesas asombradas 😍 Besos.

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    1. Laura: Y seguirán siendo princesas mientras mantengan el asombro.

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  6. Cierto. Tantas cosas bonitas y la gente está cansada de todo.
    Valorar la belleza no debe pasársenos nunca.
    Como esa expresión de felicidad de las niñas, que lindas son!

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    1. mukali: Hay gentes que ¿viven? encantadas "enlaquejacontínua", eso si...si no las obliga a tener que hacer algo para encontrar soluciones.

      La naturalidad del asombro siempre es linda.

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